Massa eligió adversario

ARGENTINA-ECONOMY-MASSA
por Francisco Vera Rojas*
A un mes para la realización de las Paso iniciaron las primeras escaramuzas políticas para atraer el voto de los indecisos e independientes.
A la dura pelea en la oposición que planteó Patricia Bullrich contra Rodríguez Larreta, con una gran cantidad de ataques directos, se suma el oficialista Sergio Massa que no se molesta en mirar a su contendiente directo, Juan Grabois, y elige a la “Piba” como su objetivo acusándola de “panqueque”.
Adivino su sonrisa al leer que el actual ministro de Economía, ex jefe de gabinete de CFK, titular de la Anses de Duhalde y Néstor, y afiliado de la Ucede acuse a su rival de su pragmatismo al arribar a un cargo.
Lo cierto es que la supervivencia del ministro y candidato del kirchnerismo se ha cimentado en su inteligencia y cintura política y por ello sabe qué, cómo dijo Sun Tzu (autor del Arte de la guerra), la guerra se basa en el engaño. Y sabe mucho de eso.
Muy distinta es Bullrich que parece con técnicas de tierra arrasada más parecidas a Atila. Y este estilo la puso en primera línea para Massa.
Habitualmente se dice que a la hora de pelear hay dos caminos: buscar al más débil para causar impresión en el resto o buscar al más fuerte para-una vez derrotado- causar miedo a los demás.
Hay que ver cómo evaluaron los estrategas kirchneristas y sus asesores extranjeros a Bullrich y porque no fueron sobre la paloma Rodríguez Larreta y prefirieron poner en discusión el accionar de Montoneros en los 70.
Buena estrategia es distraer con discusiones antiguas a los electores con una campaña tan corta y con pocos logros.
Difícil será para los y las militantes del kirchnerismo pensar o justificar su voto a Massa si la discusión pasa por el accionar de los montoneros a quienes reivindican cómo la generación diezmada.
Los estrategas políticos k recomiendan polarizar con lo más recalcitrante de la derecha para tener opción de llegar a ganar en Octubre, y ante la caída libre de Milei en las encuestas y la inexistencia de Grabois la mejor opción parece Bullrich.
Igualmente pareciera que el peor enemigo del ministro son sus propios compañeros y compañeras del kirchnerismo duro y por eso está recibiendo el apoyo del peronismo tradicional de sindicalistas y gobernadores (que no quieren perder su poder), similar a Scioli en el 2015. Todavía lamentan en el sciolismo la falta de apoyo del kirchnerismo puro al que señalan por no militar esa campaña.
La diferencia entre ese momento y ahora es que el gobierno de CFK fue malo y no estrepitosamente malo como el que ella comparte con Alberto Fernández.
Esta situación hizo perder al peronismo la gobernación de San Juan y peligran Entre Ríos y Santa Fe. Por eso el kirchnerismo se reagrupa en Buenos Aires para soñar con el 2027.
Lo cierto es que Massa sabe que en tan poco tiempo debe hacer el mayor ruido posible sin que se vea la gestión de su administración y buscar el voto desprevenido para tener alguna chance de llegar a la segunda vuelta con la ilusión de recibir la banda y el bastón el 10 de diciembre.
* Periodista y Analista político