Ciudad de Buenos Aires demoró plan educativo

La Auditoría General de la Ciudad (AGCBA) evaluó la ejecución del plan Leer para Crecer implementado por el Gobierno de la Ciudad con el objetivo de dotar de material a las bibliotecas escolares. El ente de control descubrió que los libros de texto que debían ser entregados al principio del ciclo lectivo, eran entregados a los fuera del calendario escolar. Por otra parte detectaron que la normativa que rige el plan «está desactualizada».
En su informe el organismo señaló que el plan fue diseñado para facilitar el acceso a los libros a alumnos de la sala de cinco años hasta el último curso de la secundaria de las escuelas de gestión estatal, social y de gestión privada de cuota cero de la Ciudad. Leer para Crecer fue puesto en marcha en 2010 y durante la gestión 2018 ya trabajaba con 18 editoriales, 181 títulos de textos de diversas áreas y 184 títulos en inglés. Ese ultimo año, las casi 500 escuelas alcanzadas por el programa eligieron el material bibliográfico para utilizar y se repartieron 326.402 libros.
Fallas en los objetivos
Al año de implementado el programa se modificaron los objetivos y se incorporaron al plan los textos escolares y de material bibliográfico. Al respecto la AGCBA reveló que sólo se estaban entregando libros de la segunda resolución y no de la primera, pese a que ambas continuaban vigentes.
Por su parte el el gobierno porteño, llegó a un acuerdo con el Ministerio de Educación de la Nación para acceder a la compra de libros físicos de literatura con el objetivo de constituir espacios de bibliotecas personales. De esta manera se gestó el Plan de Lectura BA cuyos destinatarios eran los alumnos de las escuelas de gestión pública desde sala de cuatro al último año de la escuela media, incluyendo el área de especial y adultos y los programas de grados de aceleración y de grados de nivelación.
Para 2018 el ente auditor porteño indicó que, tras el convenio con la cartera de educación nacional, el organismo auditado no estaba eximido del cumplimiento de la entrega de libros de literatura infantil y juvenil. El estudio de la AGCBA, explicó que mientras el programa de la Ciudad estaba pensado para fortalecer las bibliotecas escolares, el acuerdo con Nación estaba destinado a las bibliotecas personales.
Fuera de tiempo
Otro de los puntos que se menciona en el informe esta relacionado con el hecho de que las contrataciones para la compra de material no se realizaron en tiempo y forma, de manera de asegurar de que los textos estén disponibles al comienzo de las clases. Según el organismo esto revela una falta de ajuste en los plazos de las contrataciones.
La contratación de los libros se realizó por medio de 18 editoriales las cuales se tramitaron en 19 expedientes. Al examinar los archivos los auditores descubrieron que el modo de compra fue la contratación directa prevista en la Ley de Compras y Contrataciones. Todos los casos se tramitaron durante febrero y los libros escolares y de inglés se recibieron entre julio y diciembre de 2018, por lo que los plazos de las contrataciones van de uno a 11 meses.